Íñigo y Álvaro se conocieron en la universidad en 1992. Íñigo se formó como director de orquesta en Austria y Alemania y ha dado conciertos por Europa y América. Álvaro se especializó en transformación y ha colaborado con más de 100 empresas en 25 países.
Esta conversación destila sus aprendizajes después de 15 años trabajando en mundos tan distintos como la música y la consultoría, y presenta un sorprendente hallazgo: se dedican a lo mismo, la transformación de personas.
Puesta en escena:
La conversación sucede en una pequeña sala de estar (dos sillones, mesita y alfombra) con una iluminación cálida e intimista, e integra algunas breves piezas al piano.